viernes, 27 de julio de 2007

Tomás Gómez, candidato único con más del 75% de los avales






Los corrillos, donde sólo se escuchaba un nombre, ya lo avanzaban esta mañana. El gran
favorito para suceder a Rafael Simancas al frente de los socialistas madrileños se ha confirmado además como el único candidato. El alcalde de Parla ha logrado el 75% de los avales de los delegados en el Congreso Extraordinario del PSM y los otros dos apirantes, el diputado regional José Cepeda y el concejal del Ayuntamiento de Madrid Manuel García-Hierro, no han logrado el apoyo mínimo del 25% para entrar en la puja. Aunque todavía debe celebrarse esta noche la votación, no será más que un mero formalismo al haber un candidato único.Los dos derrotados prácticamente no tienen avales, tal y como apuntaban los corrillos de esta mañana, que descartaban al unísono a García-Hierro, aunque consideraban posible que Cepeda pudiera disputarle a Gómez el liderazgo. En rueda de prensa, García-Hierro no ha confesado cuántos delegados le han apoyado, pero le acompañaban una treintena de delegados. A 10 minutos de cerrarse el proceso, habían votado 834 de los 836 delegados que asisten al cónclave. De ellos, entre 140 y 150 respaldan a Cepeda, que también se ha quedado fuera de la carrera. Fuentes cercanas a Gómez aseguran que éste ha formalizado su candidatura con 640 avales. Los aspirantes han tenido cinco horas (desde las 13.00 hasta las 18.00) para conseguir el apoyo de al menos el 25% de los delegados, a fin de que la mesa del Congreso les proclamara oficialmente candidatos.
Una vez que la Mesa certifique la validez de los avales y proclame al candidato, éste podrán intervenir ante el plenario para explicar sus proyectos, lo que dará paso a la votación. Está previsto que sea proclamado vencedor poco antes de la medianoche y que las negociaciones para elegir a los miembros de la comisión ejecutiva regional se prolonguen hasta la madrugada. Mañana sábado, el nuevo secretario general presentará su propuesta de ejecutiva y la someterá a la votación de los delegados, tras lo cual el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero clausurará el Congreso.
Narbona reclama una "posición ética"
En el hotel Auditorium, situado en medio de la nada en la carretera de Barcelona, se celebra desde este mediodía el decisivo Congreso Extraordinario de los socialistas madrileños en el que, a pesar de lo que está en juego, no ha habido ningún tipo de emoción ni de tensión. En todos los corrillos, un nombre se repite: "Tomás, Tomás, Tomás". Se refieren obviamente al alcalde de Parla, que de favorito ha pasado a ganador virtual a la espera de que llegue la votación. "Va a ganar Tomás de calle", decía a su llegada a la cita una destacada cara del PSM sin duda alguna.
A su llegada a la gran cita, los tres precandidatos habían apostado por su victoria y se mostraron esperanzados de que el partido "salga reforzado". Gómez se limitó a destacar "las ganas y el ánimo de todos los delegados" y ha asegurado que el Congreso "será maravilloso". Por su parte, Cepeda, representante del sector guerrista, se definió como "un candidato más" que se presenta "humildemente ante la militancia para que al final sean ellos los que tomen la decisión". García-Hierro apuntó que su candidatura "representa el futuro, la juventud y la preparación del PSOE en Madrid", por lo que ha defendido su "foto de futuro, frente a otras fotos que tienen más que ver con el pasado".
Con un poco de retraso, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, ha sido el encargado del discurso de apertura del cónclave, al que asisten, además de los 836 delegados con derecho a voto, 2.000 invitados, entre ellos algunos miembros del Gobierno y representantes sindicales. El cónclave será clausurado mañana sábado por el secretario general, José Luis Rodríguez Zapatero. En la tribuna, Blanco ha pedido a los delegados que elijan su nueva dirección pensando en el compromiso con la sociedad y en hacer de Madrid el "baluarte de libertad y no de división y enfrentamiento" en que la ha convertido el PP.
Tras Blanco, Cristina Narbona, presidenta de la comisión gestora que ha dirigido el PSM durante el último mes y medio, en clave más madrileña que Blanco, ha presentado el informe que ha elaborado esta comisión sobre las causas de la derrota electoral del 27-M. El documento también contiene una serie de recomendaciones dirigidas a la ejecutiva que surja del Congreso, entre ellas que el PSM configure un proyecto que proporcione "respuestas nuevas a lo que tradicionalmente se ha conocido como clases medias". En su intervención, la ministra ha llamado a elegir "líderes éticos, en lo personal, lo profesional y lo político, para ser diferenciados de los del PP". Narbona ha defendido que "sólo son creíbles los líderes a los que se les ve coherentes, los que hacen lo mismo que ellos exigen que hagan los demás" y los "capaces de demostrar una posición ética en lo personal, lo profesional y lo político".
Las críticas de Cepeda y García-Hierro
Ha explicado además que esa "posición ética" que el PSM debe exigir a sus líderes y que los propios socialistas deben aplicar en la forma de elegirlos les llevará a ser "diferenciados de los del PP". Tras la intervención de Narbona, se han preparado las mesas para recoger avales y el ambiente afable que se respiraba en el hotel ha dado un giro de 180º. Los portavoces de Cepeda y García-Hierro, Juan Antonio Castillo y Francisco Hernández, respectivamente, han denunciado que su contendiente ha roto "la tradición y la historia" al imponer a sus simpatizantes en la mesa y la comisión electoral, copados por hombres de Gómez. "La candidatura de Gómez nos ha excluído de ambos órganos, vienen arrollando", han declarado. También han dado un mandoble a la gestora, a la que acusan de inhibirse en este proceso "sin querer ver lo que está pasando". El portavoz de Cepeda no ha descartado que ambos políticos acabaran uniendo sus fuerzas contra Gómez.

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